Las compañías se han adaptado rápidamente a la agilidad, hoy no solo son los nuevos proyectos o iniciativas las que se incuban y desarrollan en mesas ágiles, sino que han sabido escalar la agilidad a toda la organización o por lo menos a los procesos core de negocio.
En ese sentido, son bienvenidas las mesas ágiles si con ellas se logra la satisfacción temprana del cliente, la motivación del equipo, menores costos y la aceleración en el retorno de la inversión. Sin embargo, no debemos de olvidar que es importante estar atentos a los nuevos riesgos que puedan aparecer producto de la agilidad; por lo tanto, toda empresa que se considere madura en la gestión del riesgo debe mantener un adecuado ambiente de control que acompañe a esta vorágine de proyectos, productos y procesos desarrollados por dichas mesas ágiles.
Algunas personas se preguntarán, ¿acaso el ambiente de control diseñado para el desarrollo bajo metodologías tradicionales no es suficiente? ¿Debo añadir o reemplazar algunos o todos los controles que tenía anteriormente cuando desarrollaba con el método cascada? ¿Mi equipo de auditoría interna tiene un plan que incluye de manera oportuna la evaluación de los riesgos propios del desarrollo ágil?
Adicionalmente, si leemos detenidamente los valores del manifiesto ágil y analizamos el ambiente de control actual, podemos hacernos más preguntas aún:

La gran respuesta a estas preguntas definitivamente es sí, efectivamente el ambiente de control diseñado para el desarrollo bajo metodologías tradicionales debe ser reevaluado para que pueda dar pase a la agilidad y acompañarla desde sus propios conceptos. Veamos algunos ejemplos:

Un aspecto en común que tienen estos tres ejemplos es que la oportunidad del control es importante, este se debe dar en cada sprint, no al término del desarrollo de todo el backlog. Por lo tanto, lo ideal será preferir los controles automáticos a los manuales, los preventivos a los detectivos.
En respuesta a esto, desde un punto de vista de las tres líneas de la organización, será importante responder si se tienen las capacidades técnicas y de recursos; asimismo, es vital adaptar sus propios controles y planes para acompañar de manera temprana el desarrollo ágil.
Acerca del autor
Lorena es especialista en riesgos y controles con más de 20 años de experiencia en auditoría, evaluación de ambientes de tecnología de información, organización y planeamiento estratégico, desarrollo e implantación de aplicaciones, control de cambios a los sistemas, seguridad física y lógica y continuidad de
las operaciones.
Ha realizado diversos trabajos de consultoría de procesos, sistemas y evaluación de riesgos y controles para empresas de diverso sector empresarial.
Asimismo, se desempeñó como profesor de Planeamiento estratégico de empresas en la Universidad Femenina Sagrado Corazón (UNIFE) y actualmente es instructor de la currícula central de la Firma. Lorena es Ingeniera de Sistemas de la Universidad Femenina Sagrado Corazón (UNIFE), también cuenta con un diplomado en Gestión de proyectos en la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC).
