Hace unos meses, ChatGPT sorprendió al mundo. Este gran modelo lingüístico desarrollado por OpenAI revolucionó rápidamente el campo del procesamiento del lenguaje natural, superando incluso el ritmo al que Netflix, Facebook, Spotify e Instagram alcanzaron el millón de usuarios. Esto demuestra la creciente demanda de tecnologías avanzadas de inteligencia artificial (IA).
ChatGPT se hizo viral en gran parte por su facilidad de acceso e interacción, así como por su capacidad para acelerar el trabajo diario y mejorar la productividad. La herramienta ha evolucionado nuestra capacidad de interactuar con la tecnología y ha hecho posible responder a preguntas de seguimiento, admitir errores, cuestionar premisas incorrectas y rechazar solicitudes inapropiadas.
La inversión ha inundado las organizaciones que cuentan con tecnología de IA generativa, como Microsoft, Google y AWS. En ese sentido, existen oportunidades en todas las organizaciones y se espera que el mayor impacto se produzca en profesionales, ciencias aplicadas, mandos intermedios y servicios educativos.
Por su parte, los directivos se preguntan cómo pueden utilizar esta tecnología emergente para crear ventajas estratégicas y cómo afectará a la plantilla de su organización.
La carrera está en marcha para desplegar esta tecnología de forma que impulse resultados empresariales significativos. Las organizaciones tienen un enfoque inmediato en las interacciones con los clientes, pero también hay oportunidades en las funciones corporativas. Más allá de la experimentación, un plan de ataque claro y priorizado que esté vinculado a su estrategia organizativa y a su estrategia de personal puede ayudar a crear una ventaja en el mercado y mejorar su capacidad para lograr una mayor rentabilidad.
La IA generativa puede cambiar por completo el ecosistema de las interacciones con los clientes. Es posible automatizar la interacción directa y apoyar a los miembros del equipo con datos mejorados. Más allá del arbitraje laboral, las organizaciones deberían centrarse en las oportunidades de mejora de la marca y de crecimiento de los ingresos brutos que presenta esta tecnología.
El nuevo mundo laboral exige que las organizaciones fomenten nuevas mentalidades y comportamientos. Los directivos y empleados de toda la empresa deben adquirir conocimientos técnicos y mostrar comportamientos que promuevan una amplia adopción de la tecnología emergente. Los líderes tendrán que recompensar la curiosidad y la experimentación, crear tiempo en las jornadas de su equipo para probar nuevos enfoques y fomentar la capacidad de equilibrar la asunción de riesgos con la gestión de los mismos.
La IA generativa tiene el potencial de alterar las tareas cotidianas de grandes segmentos del equipo de trabajo. Muy pocas organizaciones conectan realmente su hoja de ruta tecnológica con su plan de personal, pero debido a lo interconectados que estarán estos dos elementos en el futuro, un plan integrado se convertirá en un imperativo empresarial. Los directivos deben tener esto en cuenta en su estrategia global de personal y considerar las repercusiones que tendrá en áreas como el aprendizaje y el desarrollo, la gestión del rendimiento, las recompensas, la contratación y la incorporación.
Adoptar la IA generativa puede permitir a los trabajadores ser más estratégicos, pero las capacidades estratégicas tardan años en desarrollarse. Si esto se aborda de forma proactiva, las organizaciones pueden mejorar la propuesta de valor de sus empleados, permitiendo un trabajo más significativo y estratégico, al tiempo que crean una ventaja que los competidores tardarán años en igualar.
Adaptación del texto original en inglés publicado por PwC y gestionado por PwC Perú.